A lo largo de esta semana son muchas las personas que nos han llamado con el fin de informarse de hasta que punto puede influirles la anunciada fusión de Caixabank y Bankia al tener productos contratados en cada uno de esos bancos.
Desde Consumidores AL-Andalus Málaga os enunciamos algunas de las situaciones en las que podéis encontraros:
La integración de estas dos entidades financieras implica en una parte de la numeración de las cuentas corrientes de los clientes.
Seguramente la mayor parte de los dígitos seguirán vigentes, pero no ocurrirá lo mismo con los dos primeros que forman parte del denominado IBAN (una identificación de ámbito o internacional requerida por las entidades para identificar una cuenta).
En cualquier caso, las domiciliaciones asignadas a una cuenta concreta (luz, agua, gas, ingresos como la nómina, cuotas, impuestos, etc.) se transfieren automáticamente de una cuenta a otra cuando ambas entidades estén integradas sin que el cliente tenga que realizar ninguna gestión.
La banca cuenta con una serie de productos ‘inamovibles’. Esto es, que ni la entidad ni los clientes pueden modificar al menos de forma unilateral.
Son, por ejemplo, los contratos indefinidos de las hipotecas, el principal producto financiero con el que cuenta una familia a lo largo de toda su vida.
Los préstamos sobre vivienda no sufrirán modificaciones independientemente de que CaixaBank absorba Bankia, como está previsto. Las condiciones de esas hipotecas se mantendrán en todos sus términos relativos a tipos de interés, plazos, vinculaciones y cualquier otra característica.
Lo mismo ocurre con los créditos personales, también consentidos por ambas partes desde su firma. Se mantienen los compromisos del cliente para pagarlos y los del banco para seguir aplicando las mismas condiciones financieras.
El nuevo banco podrá modificar las condiciones de productos como las tarjetas de débito y crédito, los seguros o los fondos y planes de pensiones (cuotas, comisiones o tipos de interés, en su caso), advirtiéndolo previamente al titular con dos meses de antelación, para que podamos desistir si no nos beneficia.
Si la modificación de las condiciones resultan favorables al cliente, el banco puede aplicarlas inmediatamente.
Si no es así, el banco debe comunicar la modificación contractual de forma individualizada, con una antelación mínima de dos meses respecto de la fecha de su entrada en vigor y de forma independiente de los documentos de liquidación de las operaciones, considerando que aceptas de forma tácita la modificación si transcurre ese plazo sin que comuniques tu oposición.
4. Cajeros automáticos.
En el caso del uso de los cajeros automáticos tanto CaixaBank como Bankia comparten la red Servired, por lo que la integración, en este caso, puede ser positiva para los usuarios a la hora de utilizar estos terminales.
5. Reclamaciones judiciales y extrajudiciales.
Si tuvieras una reclamación iniciada contra algunas de estas entidades por IRPH, gastos de préstamo o cláusula suelo, siguen su curso, sin que tengas que hacer nada.
Si tienes alguna consulta o reclamación envíanos un correo a la dirección malaga@fed-alandalus.es o llámanos al teléfono 952 21 35 40.